La 28ª jornada en la Serie A se presentaba propicia para la Juventus. Una victoria sobre la Atalanta le habría permitido igualar a ‘La Dea’ en la tercera posición y situarse a seis puntos del Inter. Los más optimistas, incluso, soñaban con el ‘Scudetto’.

El problema de las ‘cuentas de la lechera’ es que suelen romperse. La Juve recibió una abultada goleada ante la Atalanta (0-4) en Turín y ve peligrar su ‘plaza Champions’. Literal. Si la Lazio gana mañana a Udinese, caerá a la quinta posición.

Lo peor, curiosamente, no fue el resultado… sino la imagen que ofrecieron los pupilos de Thiago Motta. Las mejores ocasiones, a excepción de un derechazo de Khéphren Thuram que se marchó ligeramente alto en el 7′, fueron para la Atalanta.

La ‘Dea’, eso sí, se adelantó con algo de suerte en el 29′. Djimsiti forzó un penalti por manos de McKennie y Mateo Retegui no perdonó desde los 11 metros. El italo-argentino es ‘Capocannoniere’ (pichichi) destacado: suma 22 goles por los 15 de Moise Kean.

El añadido del primer tiempo fue dantesco en clave ‘bianconera’. El poste y Di Gregorio evitaron, por dos veces, que Lookman marcara en boca de goly el meta, en la jugada siguiente, sacó otra gran mano abajo para detener un potente disparo de Zappacosta.

El epílogo del primer tiempo fue el preludio de lo que pasaría en el ¡primer minuto! del segundo. Di Gregorio salvó un mano a mano con Lookman y De Roon, llegando desde atrás, recogió el rechace para marcar a placer.

La entrada de Koopmeiners -en el desanso- y de Mbangula, Alberto Costa y Kalulu en el 53′ no mejoró las cosas. Cada pérdida, cada contra, era sinónimo de gol. Los de Gian Piero Gasperini se estaban gustando y en el 0-3, en el 66′, se recrearon. Kolasinac ganó línea de fondo tras una bonita pared y sirvió de ¡tacón! para que Zappacosta marcara a placer.

Motta dio entrada a Vlahovic a la desesperada en el 75′ y un resbalón del serbio propició el 0-4 en el 77′. Recibió Lookman, encaró el área y conectó un disparo desde la frontal que, tras tocar en Kelly, despistó por completo a Di Gregorio. Los ‘tifosi’ comenzaban a desfilar vaciando las gradas del Allianz Stadium.

No es para menos. La Juventus no perdía en su estadio en Serie A por un margen de cuatro o más goles desde octubre de 1967, hace casi 58 años. Adiós ‘Scudetto’. Peligra el proyecto, peligra la Champions… y peligra Motta.